viernes, 17 de julio de 2009

no hay monos en la costa ¿o sí?

Si debemos resumir la experiencia de hacer este blog, nuestro primer blog comunitario, tenemos que decir que fue, sin ninguna duda, más trabajoso de lo que hubiéramos imaginado. Y es que nuestros previos y humildes intentos personales por desarrollar blogs, si no abandonados, sin seguidores, son simples diarios en los que defogamos todos los rollos personales que concentramos a lo largo de nuestras aburridas vidas de universitarios. Hacer constantes posts con un objetivo y tema determinado, debemos reconocer, no es nuestra pasión. La dispersión, como podrán observar, es el único elemento de cohesión entre entrada y entrada, lo cual no está mal, creo yo. Cada uno de los integrantes de este blog son universos totalmente distintos con pasiones totalmente distintas o sin ninguna pasión at all. No es ningún misterio, entonces, la razón de nuestras breves ausencias o de algunas encendidas discrepancias en la forma de tocar un tema que algunos pudimos tener y de las que nadie se enteró porque nadie lee nuestro blog (ja). Lo dijimos al principio y lo decimos ahora: tenemos la grave enfermedad o la extraordinaria virtud de no tomarnos nada demasiado en serio. Con éxito o no, este blog comenzó como la tarea de un curso al que estamos obligados a asistir con desconocidos algo más jóvenes por algún inoportuno cambio de currícula, pero fue, como quien no quiere la cosa, desprendiéndose de ese primer motivador. Eso es bueno. Gracias José Vergara por arreglar el diseño del blog aunque sea en la última semana de clases, gracias José Miguel Lara por dejar de lado los posts fresones y comenzar a hacer algo para lo que eres realmente bueno: diseñar, gracias Paola Terán por ser la primera en atreverse a pimpear el blog y por tus excéntricos posts que tienen una evidente influencia timburteana u otro referente gótico aunque lo niegues rotundamente, gracias Pilar Prado por meter presión para postear todo lo que debíamos postear y gracias a mí autodenominarme editora de contenidos.
Pedimos disculpas por todas las impertinencias y faltas de ortografía que hayamos posteado y pedimos disculpas si no llenamos las expectativas, pero como dijimos la primera clase ante un profesor con cara de "¿cómo @$!"=?¡ me van a decir eso?": todo es cultura, ¿no?


Monos en la costa

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